viernes, 5 de noviembre de 2010

Es mi piel, sin duda, terca y obsesionada en su afinidad contigo...




2 comentarios:

Norma dijo...

He viajado por todos los sitios en que participas, eres tremendamente inquieta. todo bárbaros.
Cariños.

hacedor de trampas dijo...

Te entiendo perfectamente, pero hay que saber ponerle freno al corazón porque sino acaban por dañarte, aunque eso lo digo para los demás, nunca supe domesticar mi corazón. Es indomable.